El lobular superior izquierdo se halla ocluido por un tejido anómalo, de superficie homogénea y algo rugosa.
La carina secundaria tiene un aspecto curiosamente lineal y recto.
A lo lejos se ve el lobular inferior, poco iluminado.
El lobular superior izquierdo se halla ocluido por un tejido anómalo, de superficie homogénea y algo rugosa.
La carina secundaria tiene un aspecto curiosamente lineal y recto.
A lo lejos se ve el lobular inferior, poco iluminado.